lunes, 5 de febrero de 2018

Hambre de buey

Compulsión. La elocuencia del poder. Ave de tempestades al pairo de la ocurrencia sin credibilidad. Membretes y orígenes inciertos.

Una frustración resultante de una valoración excesiva innecesaria que me toca los extremos desde hace más de 13 años. Escribo para recordarme que el compromiso es conmigo, sin permitirme creer que esto puede más que yo.


Hoy Lunes, no sé qué de febrero, tengo mi primer ataque de ansiedad con 25 años. La frecuencia y duración siguen disminuyendo, la intensidad se siente mayor en los primeros minutos en comparación con los episodios pasados, pero lo puedo manejar mejor y eso es reconfortante en cierto modo.